domingo, 7 de noviembre de 2021

De los Gatos pardos


Tu llevabas cuero en las piernas
Y tristeza en la mirada    
De esperanzas cansadas de esperar
Tristes de vacías y copas rotas

Y un corazón bonito de tiza y de sal

Y una sonrisa, cansada de buscar a quien sonreír.


Yo llevaba tres focos amarillos y dos verdades en la boca,

Cuatro gatos pardos y rojos

la distimia a flor de piel y un sombrero roto

Olvidando sin poder

Estos labios tuyos rojos y ese cabello 

bien pegado a la sien.


Me dijeron que eras tu

Quien compraba las tristezas al mayor

te dijeron que era yo

Quien vendia desamor en la orilla de la playa

Ni tu comprabas ni yo vendía

Solitos y ciegos de cariño y de ironías 



Y tropezando con tus labios encontré el desamor

Que vuela a mi costado sobre una servilleta

Que tenia un “llámame algún día”

Sin numero, sin santo y seña, y sin poesía.



Te esperé alegre y sin esperanza

Con 2 maletas en esa calle de melancolía 

Ese domingo, este lunes y el año que pasó

Parado en el dintel, sonriendo por no llorar

Las penas, la saudade del cariño

De mi ángel que ni extermina ni me salva


Y ya no quiero caminar por la cornisa 

Sonriéndole al cielo y a la noche brisa

Recordando que me había olvidado 

De tu cara y tu voz a mi costado 

Meciéndome en esa cuerda fija y

Retando al destino que me mira y sin vergüenza, rie. 


lunes, 3 de mayo de 2021

Del Tiempo


El tiempo es un cruel invento 

de alguna nostalgia encarnada 

Es la respuesta desmedida 

de un dios celoso de la muerte. 

El tiempo es nostalgia y es dolor

Porque la felicidad no se cuenta 

Sino en el instante que sucede

Y se recuerda porque muere,

Y se confunde con amor.

De las Vueltas

 



He querido escribir algo estos últimos meses, sin embargo, las situaciones comunes y cotidianas del dia a dia, me han secado. Por el contrario, he leído mucho, a un ritmo casi vertiginoso, varios libros en pocos meses, ha sido reencontrarme con un gusto que había perdido, de repente por entregarme a la intrascendencia de una vida carente de sentido y emociones. Y con esto no sugiero que antes las haya tenido, pero definitivamente la juventud crea por si sola una expectativa de la vida que te hace creer que estás viviendo una aventura.

Mi padre murió el año pasado, con el murieron muchos malestares y un cariño que no sabía que aun tenía por el. Siempre recuerdo la analogía de la visión particular de la paternidad a la que uno desarrolla del concepto de dios personal, tal vez por eso soy ateo, tal vez por eso he hecho de mi bandera la muerte de dios, hasta que murió mi padre. Desde entonces, creo que soy un poco más agnóstico.

Al final estoy escribiendo, aunque como si esto fuera un diario y no como lo que quisiera que fuera. Espero que la intención valga, aunque particularmente creo que vale muy poco. "de buenas intenciones está lleno el infierno", escuché decir alguna vez a alguien, tal vez a mi padre.

La vida da vueltas y ya estoy muy mareado.